Soy psicóloga con formación en intervención clínica y neuropsicología, y trabajo con adultos y jóvenes que atraviesan dificultades relacionadas con el trauma, la ansiedad, la regulación emocional, la autoestima, la dependencia afectiva, el estrés y los conflictos interpersonales. Trabajo desde una mirada integrativa que combina distintos enfoques para adaptarme a las necesidades de cada persona, incluyendo terapia cognitivo-conductual, psicoterapia humanista y terapia de esquemas. Con esto, mi intención es comprender cómo los patrones emocionales, los procesos mentales y el funcionamiento cerebral influyen en tu bienestar psicológico, y así acompañarte en el proceso. Adapto cada intervención al ritmo, la historia y las necesidades de la persona que tengo delante, buscando que el proceso sea significativo y sostenible en el tiempo.
Mi objetivo es acompañarte a entender el origen de tu malestar, ayudarte a identificar los mecanismos que lo mantienen y ofrecerte herramientas concretas para manejarlo. En sesión trabajamos tanto la comprensión del problema (sus raíces, sus funciones y los detonantes que lo reactivan) como la intervención del problema, para que el cambio se refleje en tu día a día de forma realista y progresiva.
Aspiro a crear un espacio seguro, cercano y personalizado donde puedas expresarte sin miedo al juicio, validar tus emociones y construir formas más sanas de relacionarte contigo y con los demás.
Sobre mí
Concibo la terapia como un lugar donde puedes pausar y mostrarte tal cual eres. Soy una persona cálida y cercana, y muy curiosa por comprender cómo cada historia se articula a nivel emocional y cognitivo. Sé que todas las personas atravesamos momentos de confusión, vulnerabilidad o bloqueo, y que pedir ayuda es un paso muy difícil.
Espero que en cada sesión te puedas mostrar con libertad, compartir, cuestionar, explorarte en profundidad y en última instancia encontrar un poco más de claridad sobre lo que estás sintiendo y lo que buscas. Fuera del trabajo, disfruto del deporte, la lectura de temas muy variados y los pequeños rituales del día a día que ayudan a cultivar bienestar. Creo firmemente que el equilibrio emocional se construye ahí: en lo cotidiano, en aprender a escucharte, y en tratarte con más amabilidad y paciencia.