Imagina: estás embarazada. De repente, parece que el mundo entero se ha puesto en tu contra. Tus hormonas están en un carrusel, tu cuerpo se está transformando y tu mente... Bueno, tu mente está en un millón de lugares a la vez. Pero, respira hondo, no estás sola.
La ansiedad en el embarazo es más común de lo que piensas y no implica que estés haciendo algo mal o que no estés preparada para ser madre. Es un fenómeno completamente normal, pero si aparece es necesario aceptarlo y hacer algo con ello.
En este artículo, vamos a explorar este laberinto emocional llamado "ansiedad en el embarazo". Vamos a conocer qué es, por qué ocurre y, lo más importante, cómo puedes manejarlo para disfrutar de tu embarazo y maternidad al máximo.
¿Cuáles son los síntomas de ansiedad en el embarazo?
Saber si estás experimentando síntomas de ansiedad durante el embarazo no siempre es fácil porque, en ocasiones, pueden confundirse con las típicas molestias que pueden surgir en este periodo vital. Aquí te presentamos algunos indicadores que podrían sugerir que estás lidiando con ansiedad en el embarazo:
- Sensación constante de miedo o preocupación: ¿te encuentras preocupada por el futuro constantemente? ¿Tienes miedo de que algo malo suceda? Esta inquietud constante puede ser un indicador de ansiedad.
- Cambios de humor repentinos: los cambios rápidos y drásticos en el estado de ánimo, como pasar de estar eufórica a estar triste, pueden ser un signo de ansiedad.
- Problemas para dormir: el insomnio y la ansiedad en el embarazo a menudo van de la mano. Las pesadillas y los sudores nocturnos por ansiedad también pueden estar presentes.
- Palpitaciones cardíacas o taquicardia: ¿has notado que tu corazón late con más rapidez de lo habitual? Un ataque de ansiedad en el embarazo puede provocar este tipo de síntomas.
- Inquietud física y mental: sentirte inquieta, con nervios, sin poder relajarte o calmar tu mente, puede ser otro signo de ansiedad en el embarazo.
- Pensamientos obsesivos: ¿te resulta difícil alejar ciertos pensamientos o miedos de tu mente? Estos pensamientos recurrentes pueden ser un síntoma de ansiedad estando embarazada.
- Síntomas físicos: además de las palpitaciones, puedes experimentar sudoración excesiva, temblores, dolores de cabeza o mareos.
Si experimentas alguno de estos síntomas, te recomendamos que hables con tu médico o un profesional de salud mental, como un psicólogo o psicóloga con experiencia en el manejo de la ansiedad.
¿Es normal tener ansiedad en el embarazo?
Llegamos a la pregunta del millón. ¿El embarazo produce ansiedad? En pocas palabras: sí. Ansiedad y embarazo son dos conceptos que suelen ir unidos y por una buena razón.
Durante el embarazo, la mujer está creando una vida, lo cual es absolutamente aterrador y emocionante al mismo tiempo. Tu cuerpo está pasando por cambios que ni siquiera puedes ver, tu vida está a punto de dar un giro de 180 grados, y todo el mundo parece tener un sinfín de consejos y opiniones sobre lo que deberías o no deberías hacer. ¿Cómo no vas a estar un poco ansiosa?
La ansiedad en el embarazo es normal. No olvides que las hormonas, esas pequeñas moléculas que son como los directores de orquesta de nuestro cuerpo, dictan el ritmo y la melodía de todo lo que hacemos. Durante el embarazo, estas hormonas están trabajando horas extras, lo que puede causar toda una serie de emociones intensas, incluyendo la ansiedad. A lo cual también se le suma:
- la preocupación por el bienestar del bebé,
- nuevas obligaciones como la conciliación familiar y laboral,
- cómo será el parto,
- cómo será la maternidad,
- y una lista interminable de "y si...".
En los casos más graves, cuando existe ansiedad crónica sumada a esas preocupaciones constantes, puede producirse un trastorno de ansiedad generalizada (que debe confirmarse o descartarse realizando un test para la ansiedad generalizada como el GAD-7, por ejemplo).

Crisis de ansiedad en el embarazo: ¿afecta al bebé?
Durante el embarazo, puedes experimentar momentos de crisis de ansiedad. Suelen surgir dudas en tu mente como: "¿la ansiedad en el embarazo afecta al bebé?" o incluso "¿mi ansiedad en el embarazo puede parar su corazón?" Estas son preguntas legítimas y preocupaciones que muchas mujeres comparten y es importante abordarlas.
Si viene a tu mente la idea de “estoy embarazada y tengo mucha ansiedad” es natural preocuparse por cómo tu estado emocional puede afectar a tu pequeño. Los ataques de ansiedad en el embarazo pueden generar gran preocupación. Si los experimentas es fundamental hablar con tu médico sobre ellos. Los estudios han mostrado que altos niveles de ansiedad y estrés en el embarazo pueden tener ciertos efectos, tanto en la madre como en el feto, pero cada caso es único. Además, en algunos casos, la ansiedad intensa durante el embarazo puede ser un factor de riesgo para desarrollar depresión postparto después del nacimiento del bebé.
Entender que la ansiedad afecta el embarazo de diversas formas es el primer paso para manejarla de manera efectiva. Además, si la madre ha experimentado altos niveles de ansiedad durante la gestación, podría ser recomendable realizar un test de depresión postparto después del nacimiento. Esto ayudaría a identificar posibles síntomas depresivos y tomar medidas preventivas para su bienestar emocional.
El bienestar de tu bebé es, por supuesto, primordial, pero también es crucial cuidar de tu salud mental. Hay muchos recursos y tratamientos disponibles para ayudarte a manejar la ansiedad en el embarazo y ninguna madre debería sentirse culpable por buscar la ayuda que necesita.
Consecuencias de la ansiedad en el embarazo
Es posible que te estés preguntando: "¿Cómo afecta la ansiedad en el embarazo?" o "¿Es malo tener ansiedad en el embarazo?" La respuesta, aunque puede ser inquietante, es importante: sí, la ansiedad durante el embarazo puede tener efectos tanto en ti como en tu bebé.
No es ninguna novedad que la ansiedad en el embarazo pueda ser agotadora, pero también puede tener consecuencias más allá de tus propios sentimientos de inquietud. Aquí te presentamos algunas de las consecuencias potenciales que podrías enfrentar:
- Efectos físicos para la madre: la ansiedad puede llevar a problemas de sueño, un sistema inmunológico debilitado, dolores de cabeza y tensión muscular. En algunos casos, puede conducir a problemas más graves como hipertensión y enfermedades del corazón.
- Impacto emocional: la ansiedad puede provocar estrés emocional, que puede intensificarse a lo largo del embarazo y provocar depresión u otros trastornos del estado de ánimo.
- Efectos en el parto: se ha encontrado que la ansiedad puede estar relacionada con un mayor riesgo de parto prematuro y de bajo peso al nacer.
- Efectos en el bebé: aunque aún se está investigando, hay estudios que sugieren que la ansiedad en el embarazo puede afectar al bebé, posiblemente influenciando su desarrollo emocional y cognitivo.
Es cierto que escuchar cosas como que la ansiedad en el embarazo es peligrosa puede desencadenar más preocupaciones, pero aquí viene la parte tranquilizadora: hay formas efectivas de prevenir estos efectos. Con la orientación correcta y las herramientas adecuadas, puedes aprender a manejar tu ansiedad y reducir el riesgo de estas consecuencias.

Tratamiento para la ansiedad en el embarazo
“¿Cómo calmar la ansiedad en el embarazo?”
Existen diversas formas de tratar y controlar la ansiedad durante el embarazo. Algunas mujeres encuentran alivio a través de terapias naturales, mientras que otras pueden requerir medicación para la angustia y ansiedad en el embarazo. Recuerda, lo más importante es encontrar un tratamiento que se adapte a tus necesidades y que sea seguro para ti y tu bebé.
- Terapia psicológica: un profesional de la salud mental puede brindarte estrategias y técnicas para manejar la ansiedad, como la terapia cognitivo-conductual (TCC). La TCC te ayuda a entender y cambiar patrones de pensamiento que llevan a comportamientos ansiosos.
- Técnicas de relajación: no hay nada como aliviar la ansiedad en el embarazo con prácticas relajantes como la meditación, la respiración profunda o el yoga prenatal. También puede ser útil para aliviar la ansiedad en el embarazo dedicar un poco de tiempo para ti misma cada día. Masturbarse en el embarazo también es una práctica relajante que puede ayudar a liberar las tensiones.
- Ejercicio físico: sabemos que es bueno para la ansiedad en el embarazo hacer ejercicio. No tiene que ser nada agotador, incluso una caminata diaria puede marcar la diferencia.
- Tratamiento farmacológico: si estás pensando "necesito algo más fuerte, ¿qué medicamentos para la ansiedad en el embarazo puedo tomar?", es importante que discutas esta opción con tu médico. Algunos medicamentos son seguros para usar durante el embarazo, pero deben administrarse bajo el cuidado de un profesional de la salud. Será el profesional quien te diga lo que tomar para la ansiedad en el embarazo. Lo importante aquí es no automedicarse.
- Soporte social: nunca subestimes el poder de una buena charla. Compartir tus preocupaciones con amigos, familiares o un grupo de apoyo puede ayudarte a aliviar tus miedos y preocupaciones, lo que puede ser una manera de lidiar con la ansiedad en el embarazo.
- Foros y grupos de apoyo: unirse a foros en línea y grupos de apoyo para embarazadas puede ser muy beneficioso. Estos espacios ofrecen la oportunidad de compartir tus experiencias y escuchar las de otras mujeres en tu misma situación.
Ansiedad en las distintas etapas del embarazo
La ansiedad en el embarazo no es un fenómeno de "talla única". Puede variar, al igual que los síntomas de embarazo, a lo largo de las distintas etapas del embarazo. Cada trimestre viene con sus propios desafíos y emociones únicas, y comprender estos cambios puede ayudarte a prepararte y manejar mejor cualquier ansiedad que puedas experimentar.
A continuación, vamos a ver qué puede ocurrir en cada trimestre.
Ansiedad en el embarazo: primer trimestre
El primer trimestre del embarazo es una montaña rusa emocional que marca el comienzo de la maternidad. Este es el momento en que se hace realidad: "estoy embarazada". Tal vez estás lidiando con ansiedad en tu primer trimestre de embarazo, y esto es completamente normal. Tu cuerpo está cambiando, las hormonas están bailando la conga y tu vida, tal como la conocías, está evolucionando.
La ansiedad en el primer trimestre puede estar llena de emociones intensas, de la alegría desbordante a la preocupación por todo lo desconocido. Los pensamientos como "¿seré una buena madre?" o "¿estará bien mi bebé?" pueden ocupar tu mente. Quizás te preocupes por la posibilidad de un aborto espontáneo, una preocupación común en esta etapa, incluso aunque no existan razones médicas para ello.
Sin embargo, aunque es un período de incertidumbre, también es un tiempo maravilloso. Recuerda, tu cuerpo está haciendo algo increíble, está creando una nueva vida. Tomarte el tiempo para cuidarte a ti misma, buscar apoyo y educarte sobre lo que está sucediendo durante el proceso, puede ayudarte a reducir la ansiedad en el embarazo.
Ansiedad en el embarazo: segundo trimestre
Entramos en el segundo acto de esta increíble obra de arte que es la maternidad: el segundo trimestre. Aquí es donde a menudo oirás decir que las cosas se suavizan un poco. Las náuseas pueden empezar a disminuir, puedes empezar a sentir los primeros movimientos del bebé, y tu barriguita ya se está haciendo notar. Pero, ¿qué ocurre con la ansiedad en el segundo trimestre del embarazo?
A pesar de que algunas cosas pueden parecer más fáciles, puede que empieces a preguntarte "¿cómo voy a equilibrar el trabajo y la maternidad?" o "¿estoy comiendo lo suficiente para el bebé?" Además, puede que te sientas más sensible, con los cambios hormonales continuando a toda velocidad.
Lo importante aquí es tomarte tiempo para ti. Prueba a hacer yoga, leer un libro, o simplemente tomar una taza de té caliente y respirar hondo. Y recuerda, cada embarazo es diferente, por lo que es fundamental que te escuches a ti misma y a tu cuerpo. Asegúrate de hablar de tus miedos y ansiedades con tu pareja, un amigo cercano o un profesional de la salud.
Ansiedad en el embarazo: tercer trimestre
Finalmente, has llegado a la última etapa de este asombroso proceso, el tercer trimestre. Aquí es donde empiezas a contar las semanas que quedan, a pensar en la cuna, la ropa del bebé… y a asombrarte de lo maravillosamente redonda que se ha vuelto tu barriga. Pero a medida que se acerca el parto, la ansiedad en el tercer trimestre del embarazo puede aumentar.
Podrías empezar a tener ansiedad al final del embarazo, lo que es perfectamente normal. Quizás estés experimentando miedo al parto o la llegada de nuevas responsabilidades. En este momento puede que estés pensando si realmente estás preparada para el parto o cómo te sentirías al tener el bebé. También podrías tener mucha ansiedad en el último mes del embarazo, ya que la cuenta regresiva se acelera.
Con todo, ten en cuenta que es normal tener estas preocupaciones. Estás a punto de conocer a tu pequeño por primera vez, y eso es emocionante y da un poco de miedo al mismo tiempo. Toma tiempo para ti misma y practica técnicas de relajación que puedan ayudarte a manejar la ansiedad.

Ansiedad y depresión en el embarazo
Es posible que si has vivido embarazos en amigas o familiares hayas escuchado lo siguiente: “estoy embarazada y tengo ansiedad y depresión". Y es que no es infrecuente que durante este periodo tan convulso como es el embarazo, las mujeres puedan desarrollar otros problemas psicológicos como la depresión.
Un embarazo con depresión y ansiedad es más común de lo que muchas personas creen. Incluso si estás esperando con ilusión la llegada de tu bebé, también puedes sentirte abrumada por los cambios físicos y emocionales que estás experimentando. Las variaciones hormonales, la presión social y la responsabilidad inminente pueden causar un torbellino de emociones, incluidas las relacionadas con sentimientos más desagradables.
La ansiedad puede manifestarse con pensamientos obsesivos sobre el bienestar de tu bebé o con preocupaciones constantes sobre el parto. La depresión, por otro lado, puede hacer que te sientas triste, desanimada, sin energía y, en casos graves, puede llevar a la desesperación.
Hablar con tu médico, un psicólogo o un grupo de apoyo puede ser de gran ayuda. No es fácil abordar un embarazo cuando la depresión y ansiedad son una realidad. Y no hay de qué avergonzarse por pedir ayuda cuando una siente que no es capaz de levantar el ánimo y de seguir adelante sola. Existen muchos recursos disponibles para ti. Recuerda siempre: cuidar de tu salud mental es una parte vital de cuidar de tu bebé.
Encontrar apoyo profesional para la ansiedad en el embarazo
Gestionar la ansiedad durante el embarazo es un acto de cuidado tanto para ti como para tu bebé; y no tienes que hacerlo sola. Reconocer que necesitas ayuda es el primer paso hacia el bienestar. En Unobravo, te ayudamos a encontrar tu psicóloga o psicólogo online, para que cuentes con el acompañamiento que necesites para afrontar la ansiedad y los cambios propios del embarazo y la maternidad.





